Una de las empresas líderes en transporte de mercancías marítimo, la danesa Maersk, ha llegado a un acuerdo con el Gobierno de España para poner en marcha en Andalucía y Galicia uno de sus principales centros de producción mundial de metanol verde, en el que invertirá diez mil millones de euros hasta el año 2030.
Ambas comunidades contarán con un núcleo de fabricación de metanol verde –con el hidrógeno verde como componente esencial– para abastecimiento de la propia Maersk. Estos centros serán el segundo y tercero a nivel global de la compañía danesa tras el de Egipto, anunciado en marzo de 2022.
El Gobierno de España ha formado parte del proyecto desde el inicio. Un proyecto que contará con fondos europeos –no se han especificado aún cifras– y en el que el propio Gobierno español podría entrar como inversor, algo muy novedoso. Se estima que esto podría crear un efecto llamada para otras empresas.
Según fuentes gubernamentales, se crearán entre 4 500 y 5 000 empleos directos en ambos emplazamientos, a los que habrá que sumar otros 40 000 indirectos y alrededor de 35 000 o 40 000 solo en la fase de construcción. El pacto se ha firmado tras una reunión entre el presidente Pedro Sánchez y el primer ejecutivo de la compañía nórdica, Soren Skou.
«El metanol verde requiere de dos ingredientes principales. Por un lado, hidrógeno verde, y por otro, CO2 biogénico. Componentes en los que España espera ser la gran potencia europea e incluso mundial»
«Es un proyecto estratégico, de país. En el futuro, las rutas marítimas se van a reconfigurar en torno a grandes hubs que abastecerán a los barcos de combustible verde, y solo los países que apuesten por su producción van a estar bien posicionados. Para España es muy importante estar en la primera división del combustible marítimo», explican las fuentes del Gobierno. Se espera que en junio de 2023 haya más detalles sobre ambos centros.
El metanol verde requiere de dos ingredientes principales. Por un lado, hidrógeno verde, y por otro, CO2 biogénico. Componentes en los que España espera ser la gran potencia europea e incluso mundial. Un estudio reciente del banco de inversión Goldman Sachs afirma que España es el país de Europa más competitivo para la producción de hidrógeno verde.
Para la generación de hidrógeno verde hace falta energía que salga de parques eólicos o fotovoltaicos. Estos serán impulsados también por Maersk y calculan que requerirán entre veinte y ochenta nuevos parques de esta tipología. En 2030 las dos plantas de producción de metanol verde deben estar operativas al cien por cien de su capacidad y necesitarán cuatro gigavatios de potencia instalada para el proceso.
Maersk comprará instalaciones de generación de energía que estén ya operativas o en fase de tramitación, pero también construirá nuevas que se ubicarán cerca de los dos centros de producción. «Llevan meses garantizándose suelo para desarrollar estas instalaciones. Han echado los números y les salen», deslizan las fuentes del acuerdo.
El objetivo es que en España se produzcan dos de los doce millones de toneladas de metanol verde que requiera la flota danesa a finales de la década. El plan es desarrollar en tres fases las centrales. En 2025 la primera de ellas –se desconoce si Galicia o Andalucía–, esta rondará las doscientas mil toneladas de generación. En 2027 con la segunda central ya operativa se rondará el millón de toneladas y en 2030 se alcanzarán los dos millones de toneladas totales.